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Hacer un uso discreto y controlado de los retinoides o ácidos como el glicólico, que pueden dilapidar el capital protector del cutis. Realizar una exfoliación extrasuave: Evita los procedimientos muy intensos, porque favorecerás la entrada de los contaminantes. Sustituye las cremas con gránulos por mascarilla peel-off (las que se sacan de una pieza cuando se secan) o mascarillas con aclarado a base de carbón activo o arcilla.
- Mantener rituales de belleza con cosméticos que hayan demostrado su eficacia. La higiene del rostro, mañana y noche, es esencial para evitar la aparición de rojeces y puntos negros (si vives en una zona con alta contaminación realiza una doble limpieza, primero con un aceite o una crema, y después con un agua micelar o un limpiador espumoso). Realizar por la mañana una limpieza suave (un agua micelar es suficiente para preparar la piel), a continuación un serum antioxidante con vitaminas C y E (que actúan en sinergia), un hidratante (manteen la piel hidratada: si está cuarteada, las microgrietas sirven de puerta de entrada a los agentes externos nocivos, aplica una crema a diario facial, loción corporal y también crema de manos para mantener íntegra la barrera cutánea de todo el cuerpo) y un fotoprotector UVB y UVA de amplio espectro (los estudios demuestran que los rayos ultravioleta amplifican los efectos de la polución, si vas a estar en el exterior, usa una crema con protección SPF30 y si quieres una eficacia máxima frente a todo tipo de radiaciones elige un fotoprotector que actúe frente a la radiación UVA y UVB, los infrarrojos y también la luz visible). Por la noche, una limpieza más profunda, incluso con cepillos específicos para retirar todo resto de partículas de maquillaje y aplicar cosméticos que restauren la barrera cutánea agredida. Emplear maquillajes minerales de buena calidad (ya que son un escudo físico magnífico al crear sobre la piel un efecto malla que evitan que las micropartículas contaminantes penetren). Rociar la piel con aguas termales o brumas en cualquier momento (especialmente en ambientes cerrados) y combinar distintas mascarillas para depurar, hidratar, iluminar.
Es probable que en una década aparezca un nuevo índice en las etiquetas (como el SPF), que certifique que las micropartículas contaminantes no penetren ni agredan a las diferentes células cutáneas. Mientras la ciencia avanza, hay expertos que no creen que sea necesario reemplazar los cosméticos habituales por unos específicos que palien la acción contaminadora, basta con mantener una rutina de higiene y protección adecuada a cada tipo de piel y utilizar activos y texturas que contrarresten la acción de los radicales libres alimentados por los contaminantes. El valor de las vitaminas C y E, que combinadas ejercen un efecto sinérgico que aumenta su acción antioxidante, además utilizar a diario filtros solares UVA y UVB (que actúan como un escudo protector frente a la radiación solar y la contaminación, evitando el factor multiplicador que tienen unidos sobre la piel) y de texturas antiadhesión que limiten la absorción de las partículas contaminantes y los gases que las transportan. Usa productos con antioxidantes porque actúan de escudo frente a los radicales libres. Dos veces al día, utiliza una crema y/o serum que lo incluyan, Asimismo, te conviene consumir cinco raciones diarias de vegetales y fruta fresca, la mejor fuente natural de antioxidantes (para que los mantengan intactos consumirlos crudos o cocinados al vapor).
Cosmética con o sin...: La Cosmética y la Polución Parte 2
Cosmética
Observaciones... Puedes descargar ésta publicación en formato pdf., en... El Mega Archivador. Puedes encontrar las referencias, la bibliografía empleada y más, en... nematodo.es
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