- Poner las raciones justas
- Cocinar con aceite de oliva peferíblemente virgen extra
- El pan a poder ser integral
- La manera de cocinar al vapor, al horno, a la plancha o escalfado
- Elegir carnes magras y no consumirlas más de 2 o 3 veces a la semana
- Incluir pescado con la misma frecuencia
- Cuando sirva pasta o arroz (mejor integral), legumbre o patata, que sea plato único
- Cocinar con aceite de oliva peferíblemente virgen extra
- El pan a poder ser integral
- La manera de cocinar al vapor, al horno, a la plancha o escalfado
- Elegir carnes magras y no consumirlas más de 2 o 3 veces a la semana
- Incluir pescado con la misma frecuencia
- Cuando sirva pasta o arroz (mejor integral), legumbre o patata, que sea plato único
Comer lento, masticar bien y saciar con agua. No es la cantidad de nutrientes lo que hay que vigilar sino la calidad. Ingerir lo adecuado, alimentos saludables. Limitar las grasas e hidratos de carbono simples e incrementar productos menos calóricos como verduras y frutas (5 piezas de fruta y verdura al día), así como fibra y agua. Adiós a las chucherías, galletas, bollería industrial, embutidos y bebidas carbonatadas.
Lo principal es la educación familiar y del paciente. En situaciones de obesidad habría que valorar de forma personalizada y con ayuda de un dietista-nutricionista la posible restricción del aporte calórico en forma de grasas e hidratos de carbono.
No es necesario pesar los alimentos pero se recomienda que la comida se ingiera lentamente y con una adecuada masticación, bebiendo agua para facilitar la sensación de saciedad y evitar la ingesta compulsiva. También que las cenas sean ligeras, ya que la última parte del día es en la que menor energía se consume.
Nutrición: Las Nutrición en la infancia y en la adolescencia Parte 2
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