Deben ser tratadas con rapidez, ya que la pérdida excesiva de sangre es peligrosa.
Si la sangre es roja y brillante, nos indica que ha sido dañada una arteria, si por el contrario es más oscura y fluye lentamente, se trata de una vena y la pérdida será más lenta. En ambos casos, se ha de actuar con rapidez.Los primeros auxilios son apropiados para el sangrado externo. Si hay un sangrado intenso o cree que hay una hemorragia interna o la persona está en shock, conseguir ayuda urgente.
Qué hacer: Qué hacer en caso de... hemorragia
Qué hacer
- Calmar y brindar confianza a la persona, ya que ver sangre puede ser muy atemorizante.
- Si la herida afecta sólo las capas superiores de la piel (superficial), lavar con agua tibia y jabón, y séquela con palmaditas suaves. El sangrado de heridas superficiales o rasguños a menudo se describe como "exudado", debido a que es lento.
- Dejar a la persona acostada ya que esto reduce la posibilidad de un desmayo al aumentar el flujo de sangre al cerebro. Siempre que sea posible, elevar la parte del cuerpo que está sangrando.
- Retirar cualquier residuo suelto o suciedad visible de la herida.
- No retirar objetos, como un cuchillo, trozo de madera o flecha, que esté enterrado en el cuerpo, pues esto puede causar más daño y sangrado. Colocar almohadillas y vendajes alrededor del objeto y pégarlo con cinta en el lugar.
- Aplicar presión directa sobre una herida externa con un vendaje estéril, un trozo de tela limpio o incluso con una prenda de vestir. Si no hay otra cosa disponible, usar las manos. La presión directa es lo mejor para un sangrado externo, excepto para una lesión ocular.
- Mantener la presión hasta que se detenga el sangrado. Cuando éste se haya detenido, envolver fuertemente el apósito sobre la herida con cinta adhesiva o con un pedazo de tela limpio. Colocar una compresa fría sobre el apósito. No mirar por debajo del vendaje para ver si el sangrado se ha detenido.No tocar nunca un coagulo de sangre que se haya formado sobre la herida
- Si el sangrado continúa y se rezume a través del material que está siendo sostenido sobre la herida, no retirarlo; simplemente, colocar otro vendaje sobre el primero. Asegurarse de buscar atención médica.
- Si el sangrado es profuso, conseguir ayuda médica y tomar las medidas necesarias para evitar el shock. Mantener la parte del cuerpo lesionada completamente inmóvil. Acostar a la persona horizontalmente, levantar los pies unos 30 cm y cubrirla con un abrigo o una manta. No mover a la persona si ha habido una lesión en la cabeza, el cuello, la espalda o una pierna, ya que al hacerlo se puede empeorar dicha lesión. Conseguir ayuda médica lo más pronto posible.
- No aplicar un torniquete para controlar el sangrado, excepto como último recurso, pues hacerlo puede causar más mal que bien. Un torniquete sólo se debe usar en una situación potencialmente mortal y lo debe aplicar una persona que tenga experiencia.
- Si se sospecha que hay una hemorragia interna (cuyos síntomas son: ansiedad, desmayo, dolor, palidez, pulso acelerado y respiración rápida), no tocar al paciente, no moverlo, mantenerlo en posición horizontal y solicitar ayuda sanitaria
Qué hacer
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